Un alto porcentaje de españoles descartan la Costa a la hora de seleccionar su destino de vacaciones. Y es que los pueblos del interior se convierten para muchos en refugios del calor. Bien sea porque tienen una segunda residencia o porque el presupuesto no da para otra cosa numerosos pueblos de España aumentan su numero de habitantes en estas fechas.
Lo que para muchos puede convertirse en un destino aburrido y monótono para otros esconde multitud de beneficios como el disfrutar de la naturaleza, la calma o la magnifica sensación de dormir arropadito fuera del calor de las zonas costeras. ¿No te convencen estas ventajas? te dejamos muchas otras que te encenderán la curiosidad por unas vacaciones en el pueblo.
– la tranquilidad lejos del bullicio de las ciudades y de los sitios con alta concentración de veraneantes
-recuperar la calidad de vida en lo que se refiere al descanso. El silencio de la noche es lo ideal par relajarte.
– olvidarse de las grandes distancias en transporte y disfrutar de ir a los sitios caminando o en bici. Podrás ir a comprar el pan o a tomar el aperitivo dando un bonito paseo.
– los pueblos del interior se convierten en sitios clave para refugiarnos del calor y dormir con manta en verano
– la proximidad a la naturaleza y a parajes naturales en los que perderte y hacer excursiones familiares, preparar un picnic o disfrutar de las magnificas pozas y rios de agua dulce.
-los precios por lo general suelen ser más baratos que de los de las grandes ciudades.
– Usar una chaquetita al caer el sol y dormir arropados sin pasar calor ni frío.
-disfrutar si coincides con las divertidas fiestas del pueblo. Verbena y bullicio pero sin agobios.
